Fiestas Anuales
Sabiote es Cultura y ocio
Se celebra cada 17 de enero desde tiempo inmemorial. Hace unos cuarenta años era tradicional soltar varios cerdos por las calles para, una vez cebados por los vecinos, subastarlos y con su importe ayudar a los gastos.
En la actualidad este día comienza con una fiesta religiosa, a la que asisten agricultores, ganaderos, artesanos y el Hermano Mayor. Al finalizar la misma comienza la procesión de este santo por las distintas calles de la localidad. Acabada la procesión el Hermano Mayor ofrece un fugaz refrigerio a los asistentes. Por la tarde se celebran las tradicionales hogueras de San Antón, en las que se fuman los cigarrillos de matalahúga, y se comen rosetas y tueste de garbanzos.
Festividad de Nuestra Señora de la Purificación
Esta fiesta comienza con la tradicional bendición de los “roscos de la caridad”, a la que asisten todos los niños de la localidad. Las madres preparan cestas de mimbre engalanadas con lazos de raso y ramos de romero en la que introducen estos roscos, hoy día con sabor a matalahúga y decorados con confites de colores. Los niños con las cestas en alto esperan que el agua bendita llegue a la suya.
Por la tarde, antes de comenzar la fiesta de las candelas, el “Comisario” de Santa María de la Estrella saliente sube la escalinata del altar mayor y hace entrega del Estandarte con vítores a la Virgen. Finalizada la fiesta, el nuevo “Comisario” se hace cargo del mismo sucediéndose los vítores a nuestra Patrona.
Seguidamente la “Mayordoma” de la Real Cofradía de Nuestra Sra. de la Cabeza recoge su gallardete.
El Carnaval es una fiesta que está tomando auge en los últimos años. En la actualidad se celebran pasacalles infantiles, concursos de disfraces de grupos e individuales, tanto de mayores como de niños, talleres infantiles, pasacalles con zancudos y animadores, etc. Estas fiestas se clausuran con el tradicional Entierro de la Sardina.
En Semana Santa Sabiote saca sus obras de arte religioso a la calle para conmemorar la Pasión de Cristo y su sacrificio por la salvación de los seres humanos. Sus orígenes arrancan de la mitad del siglo XVI, con la fundación de las Cofradías de Nuestro Padre Jesús Nazareno en torno a 1550, la de Nuestra Señora de la Soledad y la del Santísimo Cristo de la Expiración antes del año 1561. Posteriormente se creó la Cofradía del Santo Entierro en 1636 y a continuación la Cofradía de Cristo Resucitado antes de 1669. Dada su raíz histórica, nuestra Semana Santa es de semejante antigüedad, esplendor y devoción de las de capitales andaluzas como Sevilla, Córdoba o Málaga.
La Villa de Sabiote está influida por la riqueza cultural cofrade de toda España. Gracias a los hombres y mujeres de este municipio se ha mantenido la huella indeleble del amor cofrade.
Nuestra Semana Santa año tras año va creciendo, siendo un espectáculo artístico, tanto por la calidad y el valor de las tallas, como por la música de las bandas, que se distinguen por sus músicos nazarenos, ataviados con túnicas y trajes de su cofradía, que ejecutan hermosas composiciones o marchas procesionales.
Cada cofradía tiene su característica y peculiaridad, como le sucede a la Cofradía del Nazareno, en su salida la madrugada del Viernes Santo de la Iglesia de Santa María, cuando la interpretación de “El Miserere sobrecoge a los asistentes.
Seis cofradías hacen Estación de Penitencia durante la Semana Santa sabioteña, once Pasos para contemplar la belleza de la imaginería, orfebrería, tallas, bordados, etc.
Entre los escultores destaca la figura de Palma Burgos, quien dio forma a San Juan Evangelista y a la Santa Verónica.
Es de agradecer que cientos de personas trabajen durante todo el año para hacer de Sabiote un lugar de encuentro cofrade para el disfrute y deleite de nuestros paisanos y de todos aquellos que nos visitan.
Sabiote siempre ha tenido gran devoción a la Virgen de la Cabeza. La Cofradía de Sabiote es una de las más antiguas de las que asisten a la Romería.
Respecto a la construcción de la casa, se sabe que desde 1898 a 1900 los hermanos de esta Cofradía recaudaron fondos para su construcción.
En el año 1944 se trasladó la imagen a la ermita del Santo.
El mes de mayo Sabiote se viste de fiestas, comenzando el 1 de mayo, que tienen lugar las fiestas de la Virgen de la Estrella, Patrona de Sabiote, advocación que se comparte con Navas de San Juan en una curiosa pugna histórica. La noche del 30 de abril, a eso de las doce de la noche, la Virgen es expuesta y mecida, mezclándose entre los fieles, en la puerta de Santa María de la Estrella, donde al compás de la música se cantan los mayos y la numerosa concurrencia vitorea a nuestra Patrona. Al finalizar se queman fuegos artificiales. La madrugada del primero de mayo Nuestra Señora es procesionada por las calles de la Villa (por diferente recorrido cada año), y en Rosario de la Aurora es trasladada hasta la ermita de San Ginés, donde se celebra la Eucaristía, se cantan los mayos y se ofrece a los fieles la tradicional caridad de pan de aceite, habas verdes y vino.
A la tarde, tras el rezo del Rosario, Nuestra Patrona es procesionada hasta la parroquia donde se ofrece solemnísima fiesta. Allí permanece la Virgen todo el mes de mayo para la ofrenda de flores, siendo al fin devuelta a su Santuario el último domingo de mayo.
Con ocasión de las Fiestas de la Virgen de la Estrella se desarrollan carreras de caballos enjaezados al estilo de la Edad Media como ofrenda a la Virgen. De nuestras múltiples tradiciones quizás sea ésta la más arraigada y bella, ya que son únicas, al igual que los atalajes de las yeguas. Con motivo de esta fiesta se nombra una simpática comisión compuesta por el “Comisario”, su hermano mayor o su tío y el padrino de las carreras, para hacer el “Convite” de las yeguas, que consiste en visitar a los dueños del ganado caballar y rogarle, en nombre de Santa María de la Estrella, que asistan a la competición.
Las carreras se celebran a las doce de la mañana y a las seis de la tarde. En la actualidad tienen lugar en el Campo de Fútbol San Ginés.
Comienzan las carreras, el Comisario arranca su caballo y suelto de manos juega el Estandarte con seguridad y maestría; al compás suenan las palmas y vítores de los asistentes. A continuación se realizan carreras entre todos los jinetes y caballos que acompañan al Comisario.
El 15 de mayo se celebra San Isidro Labrador, patrón de los agricultores. Esta festividad es característica porque en procesión, junto al Santo, se exhibe el potencial de maquinaria agrícola del municipio, los últimos avances en maquinaria relativa al olivar y más de cincuenta carrozas que evocan tiempos pasados. Acabada la procesión tiene lugar un concierto de grupos rocieros hasta altas horas de la noche, acompañado de una copa de vino español.
El 22 de mayo es la festividad de Santa Rita. Sabiote es un pueblo muy dado a romerías y fiestas religiosas y ésta es una de ellas, aunque la ermita de esta santa se encuentra dentro de la jurisdicción de la ciudad limítrofe de Villacarrillo.
Este día la Villa se deleita al eco de alegres pasacalles que son plegaria para el Cielo. Muchos romeros, en cumplimiento de viejas promesas, hacen el viaje a pie hasta esta ermita, siendo despedidos y luego recibidos en la Puerta de la Canal.
El resto de romeros van directamente a la colonia de Herrera (en el término de Villacarrillo), donde, al terminar los actos religiosos, bailan y se animan en la explanada de la puerta de la ermita al compás de la música de actualidad.
Dicha festividad es de vital importancia en la localidad. Los vecinos por cuyas casas pasa la procesión del Corpus Christi, adornan fachadas y aceras con macetas. Se realizan paradas, en las que se alzan altares con imágenes y candelabros, y el clero luce sus mejores ornamentos.
De los primeros privilegios otorgados por Fernando III el Santo, en el Fuero de Cuenca del siglo XIII a la “Muy Leal Villa” de Sabiote, fue el de la concesión de las Ferias que habrían de celebrarse con arreglo a las bases y fecha por él fijada. El documento dice así:
“…Otorgo además Ferias que comiencen ocho días antes de la Fiesta de Pentecostés y duren hasta ocho días después de la misma fiesta y todo aquél que a estas Ferias viniese, ya sea mozo, ya viejo, ya moro, ya cristiano, ya judío, venga según quiere, y si alguno empeorase o enturbio hiciere, peche mil maravedíes y el daño que hiciere lo peche doblado y si no tuviese de qué pechar sea ajusticiado. Y si matare, métasele en el nicho con el muerto, y todo aquél que a hombre hiriere en las Ferias córtesele la mano y aquél que alguna cosa robare peche al señor mil maravedíes, y si no tuviese de qué pechar sea ajusticiado, y el que pegare sea también ajusticiado”.
Hasta aquí con toda su belleza lingüística el otorgamiento por el cual nuestro pueblo comenzó a celebrar sus Ferias y la mano justa de un Rey que con la misma mano que daba privilegios descargaba justicia.
No sabemos hasta cuándo se celebraron las Ferias por Pentecostés. Afirmamos que la celebración de nuestras Ferias de Agosto comenzaron al ser reconocido por el pueblo a San Ginés como Patrono y Protector. Existen documentos que constatan que en 1635 las fiestas se celebraban ya en honor a este Patrón.
Entre 1886 y 1888 las Ferias se celebraron los días 2, 3 y 4 de septiembre, desconociéndose el motivo.
Desde 1889 hasta la actualidad, las Ferias y Fiestas de la localidad se han vuelto a celebrar en honor a San Ginés de la Jara, celebrándose entre el 22 y el 26 de agosto.
Nuestras Ferias son alegres, tranquilas y sanas. Desde el 15 de agosto, la villa se prepara para gozar de un justo y merecido descanso unido al jolgorio callejero. Para el día 20 ya han llegado todas las atracciones de feria, casetas, churrerías, etc. El día 22 comienzan las Ferias con la salida tradicional de Gigantes y Cabezudos en la Puerta de la Villa, que recorren las distintas calles de la localidad.
El día 25 de agosto, el día del patrón, tiene lugar la solemne fiesta religiosa en su honor. Por la tarde se procesiona la imagen de San Ginés desde la Iglesia de San Pedro Apóstol hasta la Ermita que lleva su nombre. Al finalizar tiene lugar la tradicional subasta de las roscas. Después se quema una bonita colección de fuegos artificiales.
Destaca la despedida de Gigantes y Cabezudos de las fiestas y a las 12 de la noche tiene lugar un espectáculo piromusical en la Plaza del Castillo.
La fiesta de nuestro Copatrono se celebra el 24 de agosto, día taurino. No concibe Sabiote unas Ferias sin toros y éste es día señalado para celebrar la corrida de gala a la que asisten gentes de toda la provincia. Por nuestra plaza de toros, limpia y chiquita, ha pasado lo mejor de la torería, teniendo la Villa escrita una página gloriosa en los anales de la fiesta nacional.
Nuestra tradición taurina se remonta históricamente a los primeros años del siglo XVI, celebrándose las corridas en plazas móviles hasta el 12 de abril de 1914, domingo de Resurrección, en que se inaugura oficialmente nuestra plaza de toros. Por nuestra plaza han pasado figuras como Manuel Rodríguez “Manolete”, en 1934, años más tarde también lo harían Pepe y Juanito Bienvenida, Morenito de Talavera, “El Estudiante”, “El Algabeño”, Fausto Barajas, Mariano Rodríguez, Marcial Lalanda, Cagancho, Rafaelillo, Rafael Ortega “Gallito”, Pablo Lozano y el gran maestro Rafael “El Gallo”.
En los últimos años han pasado por nuestro coso espadas toreros de la categoría de Fernando Cepeda, Víctor Puerto, Pepín Liria, Domingo López Chaves, Juan José Padilla, Gil Belmonte, Manuel Díaz “El Cordobés”, Pedro Gutiérrez “El Capea” y Antonio Ferrera entre otros. Entre los rejoneadores destacan Luis Domecq, Martín G. Porras, Álvaro Montes, José Miguel Callejón, Patti Gómez, Francisco Benito, Diego Ventura, Iván Magro, Fermín Bohórquez y Jorge Piraquive.